

Ocho años en los que mafiosos de guante blanco vieron como se les abrían las puestas del tesoro para que, desde su guarida de más de cuarenta ladrones, pudieran zambullirse en él. Ocho años en los que la población española fue abducida con milagros asombrosos y embriagada en paraísos urbanísticos, mientras era saqueada a su espalda. Ocho años en los que la totalidad de los españoles debieron haber disfrutado de la bonanza económica que se extendía por todo el mundo, y de la que solo obtuvieron especulación, avaricia y endeudamiento, mientras los que tenían la obligación de velar por su bienestar, disfrutaban enriqueciéndose con sus impuestos. Incompatibles con la corrupción, decían. Mentirosos hipócritas.
Madrid, Valencia, Galicia, Castilla y León,…. y quien sabe cuantas mas autonomías, incluyendo a la dirección nacional, pueden estar relacionadas con esta trama de corrupción masiva. El juez Garzón tiró de los primeros flecos, a costa de ser insultado y vilipendiado por el PP, después hubo otros jueces que llegaron a sus mismas conclusiones sobre una presunta implicación de estos gobiernos en diversas prácticas delictivas para llevarse dinero público. Ahora, uno de los mayores escándalos políticos de la historia de España tiene metástasis, ya no sirve el olvidar, ni intentar ser victimas. Muchos años han tenido para poner freno, y muchas las oportunidades de combatirlo. No vale aquello de que se rompió con la trama cuando llegó Rajoy, hay pruebas de que se siguió contratando con ellos. Ya es tarde, pues de lo conocido hasta el momento se desprenden presuntos –siempre presuntos- indicios de manipulaciones destinadas a financiar ilegalmente actividades del partido, pero también de tratos para beneficiar los bolsillos particulares de algunos de sus miembros. Ya no estamos tratando con los trajes de Camps, sino con el de una red corrupta que trabaja exclusivamente en comunidades donde el PP gobierna y donde hay lazos estrechos, cada vez más estrechos.
Castilla y León, esta vieja región sumida en el túnel del tiempo, que duerme una plácida siesta en la mecedora del PP, sigue sedada ante la posible vinculación en la trama Gürtel del anterior consejero de Fomento y actual Presidente del Parlamento Castellano Leonés, José Manuel Fernández Santiago, por los indicios de cobro de comisiones ilegales en la adjudicación de la variante de Olleros de Alba a la empresa Teconsa. -¿Cuantas obras ha realizado Teconsa en Castilla y León?, ¿Esta empresa no es de Ulibarri, el superempresario?-. El implicado Fernández Santiago, alias TOTI, declaró en su día que no conocía de nada a Correa y que el expediente de adjudicación de la obra era impecable. Lo veremos.
El caso Gürtel es tan grave y está adquiriendo tal magnitud, que se hace necesario sea el Tribunal Supremo quien se haga cargo de la totalidad del caso de corrupción, sino, podemos volver a asistir a situaciones como las vividas en la Comunidad Valenciana con jueces amigos de imputados que no se dan por aludidos.
“Me cago en el Puto Pen Drive”.
FOTOS: www.elpais.com - www.publico.es
3 comentarios:
Vaya, pensaba que habia entrado en un blog mas o menos serio. Y resulta que he entrado en una delegacion de pezonia.
Vaya, pensaba que habia entrado en un blog mas o menos serio. Y resulta que he entrado en una delegacion de pezonia.
Vaya, pensaba que habia entrado en un blog mas o menos serio. Y resulta que he entrado en una delegacion de pezonia.
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