FISCALÍA ANTICORRUPCIÓN, ¡SÍ SEÑOR!

Si tuviéramos que hacer un homenaje por todo lo alto, este debería ser para el gran trabajo realizado por la Fiscalía Anticorrupción en estos últimos años, ya que gracias a ella y a las fuerzas de seguridad del estado, se está poniendo coto a todos los saqueos que impresentables chorizos disfrazados con trajes de diseño y cuellos almidonados, han venido cometiendo con impunidad casi absoluta.

Gürtel, Forum, Malaya, Palma Arena, Millet, Andratx, Estepona, Ejido…. y cientos y cientos de casos más que se multiplican por otros tantos municipios al calor de la especulación urbanística, facturas falsas o infladas, blanqueo de dinero, tráfico de influencias e ingeniería financiera en paraísos fiscales. Todos los días la fiscalía anticorrupción nos viene dando buenas alegrías a los ciudadanos, para que sintamos de cerca, la confianza que da ver el buen funcionamiento de nuestras instituciones, en la defensa de nuestros dineros y nuestros derechos. Y de paso, mandar un mensaje de atención a aquellos delincuentes en potencia camuflados entre la clase política, para que vayan sabiendo que sus días de impunidad con enriquecimientos fraudulentos están contados.

Desde que el euro se instauró, al ciudadano de a pie siempre se le ha escuchado aquello de que, los billetes de 500 se saben que existen pero nadie los ha visto. Los Bin Laden los llaman. España es el país de la Unión Europea donde mas billetes de 500 euros hay. Pero, ¿dónde están?. Pues ya lo estamos viendo. Cada vez que anticorrupción desarticula una red mafiosa, surgen de la nada, contenedores enteros con billetes morados. Maletas repletas, y hasta bolsas de basura a rebosar, camino de su blanqueo en algún paraíso fiscal. Cabe preguntarse, ¿Cuanto se habrá dejado de hacer, por parte de nuestros gobiernos, al habérselo metido a su bolsillo estos delincuentes?.

La Fiscalía Anticorrupción -creada por un gobierno socialista en 1995- se encontraba desarticulada, sin contenido, desfigurada. El anterior fiscal jefe anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, se quejó mucho de lo que el Gobierno del Partido Popular estaba haciendo con la fiscalía. El Gobierno de Aznar la relegó a la mínima expresión, dándose la circunstancia, de que algunas de las mafias que ahora están cayendo, comenzaron su andadura por aquellas fechas, y varias de ellas están salpicando de lleno al mismísimo Partido Popular.

Llegaron los socialistas con Zapatero al Gobierno y haciendo realidad su promesa electoral de reactivación de la fiscalía anticorrupción, la dotó de contenido y promulgó un mandato expreso de “impunidad CERO” con la corrupción. Y ahí tenemos sus resultados, un ejército de avariciosos imputados y condenados que creyeron irse de rositas dejando a los ciudadanos españoles en paños menores. No estaban preparados para que llegara un gobierno y un presidente dispuestos a desbaratar sus oscuros planes de enriquecimiento ilícito. Esta es la diferencia entre los que luchan contra la corrupción y los que dicen luchar contra ella. No todos los políticos son iguales, y estamos asistiendo a la brutal demostración de su diferencia.

Felicidades a la Fiscalía Anticorrupción, y a no desfallecer, todavía hay mucho chorizo engominado de guante blanco ahí fuera. Suerte.