Y DALE, CON LA DOBLE VARA DE MEDIR DEL PP

Y es que son cansinos, cansinos, llegando a la pedantería. Repiten y repiten, una y otra vez la misma consigna, creyendo que al final se hará realidad. Es como si las lecciones de Goebbels pudieran ser aplicadas a todas las materias y contenidos que quieran. Eso les dio resultado con los GAL y con algunas meteduras de pata de los socialistas, pero, ¡con la Constitución y los Estatutos de Autonomía, no!, ¡son las leyes magnas de todos los españoles!. Que en la derecha no crean en ellas, es su elección, pero por favor, ¡no nos las pisoteen ante las narices de los españoles!.

A Javier Arenas Bocanegra no le ha sentado nada bien, ¡pero que nada bien!, que a quien lanzaba los improperios, haya escalado a cotas más altas para el beneficio de los españoles, y se ha quedado descolocado con quien va a ser el próximo Presidente de Andalucía, José Antonio Griñan.
-¡Chaves!,¡Chaves!, ¿Dónde esta Chaves?, ¡Quien me ha quitado a Chaves!, ¡A Griñan tampoco le voy a poder ganar, pero con Chaves ya estaba acostumbrado a perder y no me echaban la bronca en Génova!-

El Partido Popular que tenemos en España saca su propia vara de medir cada vez que le viene en gana. Lo hace con los pactos junto a nacionalismos periféricos, con el terrorismo, con la corrupción,… y ahora la pasean, para intentar desesperadamente la convocatoria de unas elecciones anticipadas en la Comunidad Andaluza a causa de la salida de Manuel Chaves hacia la Vicepresidencia del Gobierno. Esto lo hace el mismo PP que ha pasado por la misma situación en varias ocasiones, como cuando Eduardo Zaplana fue alzado por Aznar en 2002 al Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, dejando en su lugar de President de la Generalitat Valenciana, al vicepresidente primero José Luis Olivas. Incluso en nuestra comunidad de Castilla y León, Juan Vicente Herrera fue el sustituto de Juan José Lucas, cuando su maestro Aznar, hizo caso a sus súplicas y le tocó con el dedo para proclamarlo Ministro de la Presidencia. El propio José María Aznar dejó en 1989 a su Consejero de Fomento, Jesús Posadas como Presidente de Castilla y León, al irse a Madrid para refundar el neocon Partido Popular que hoy existe. Adolfo Suárez dimitió dejando a Leopoldo Calvo Sotelo de candidato a Presidente del Gobierno al que llegaría tras votación del Congreso de los Diputados. Hasta Tony Blair dejó a Gordon Brown como Primer Ministro sin tener que celebrar elecciones anticipadas en las tan queridas, para los ultraliberales españoles, Islas Británicas.

Este es el Partido Popular que dicen ganará las elecciones europeas del 7 de junio, un partido que pide para los demás lo que no quiere para él. O que exige a otros, todo lo que no se exige a si mismo.
La derecha siempre fue y será la derecha.

PD: La Izquierda Unida de Cayo Lara está a un paso de sentarse a tomar café con Rajoy. Cuestión de tiempo volver a ver la famosa pinza de los extremos. Una pena.